Para cuando la temporada 2015-16 del fútbol europeo haya comenzado, los ingresos provenientes de contratos por naming rights con empresas de telecomunicaciones se habrán triplicado en los últimos cuatro años.
Esta tendencia puede apreciarse tanto en las ligas del fútbol europeo como en las grandes ligas del deporte de Estados Unidos, en donde las empresas de telecomunicaciones están invirtiendo más que ningún otro sector. Ésta es la principal conclusión del último estudio efectuado por la consultora Repucom sobre naming rights.
Los gráficos muestran que, si bien las cifras recaudadas en el deporte americano son todavía mayores en concepto de naming rights con telcos, es en el fútbol europeo en donde se ha verificado el mayor crecimiento en la recaudación.
La explicación para este fenómeno es sencilla: la demanda de mejores soluciones de conectividad aumenta sin cesar debido a que cada vez más gente desea compartir contenido en las redes sociales. En el ámbito deportivo, justamente, en donde la demanda del público por este servicio se agudiza, los estadios no han estado a la altura con servicios de calidad. Esto ha sido aprovechado en los últimos años por las empresas de servicios de telecomunicación para activar sus marcas mediante grandes patrocinios. Entre ellos, los naming rights de los estadios.
Algunos de los casos más conocidos en Estados Unidos son los del AT&T Stadium de los Dallas Cowboys, en Texas, y el Avaya Stadium en donde juegan los San José Earthquakes de la MLS. En Europa, la mismísima Catedral de Wembley se ha pasado a denominar oficialmente “Wembley Stadium connected by EE” desde feberero de 2014.