Desde hace unos años, KPMG se ha convertido en una de las redes globales de firmas de servicios profesionales más importantes del mundo. Pero si se está involucrado con entes bañados en corrupción, es difícil mantener ese status. Desde que salió a la luz el denominado #FIFAGate, la federación internacional de fútbol no ha sabido recibir más que malas noticias. Por eso, la firma de los Países Bajos ha renunciado a a auditoría de FIFA.
La confirmación se realizó sólo 10 días después en que fue anunciado uno de los mayores casos de corrupción de la FIFA. Éste involucra al ex-presidente Joseph Blatter, junto a el ex secretario general, Jerome Valcke, y el ex director financiero, Markus Kattner. Según documentos oficiales, se repartieron 75 millones de Euros entre sí, bajo la justificación de bonificaciones, incentivos y aumentos salariales.
A pesar de este bochorno, desde la entidad con sede en Suiza no ven con malos ojos el cambio de auditoría de FIFA, ya que ayudará a limpiar la imagen. “El nombramiento de un nuevo auditor, junto al de un nuevo director financiero y un nuevo director de compliance (asegura que se cumpla toda la normativa), son pasos esenciales en este proceso”, establecía el comunicado oficial de la FIFA.
