El Mundial de Argentina: un hito que parecía cada vez más difícil

El Mundial de fútbol es sin duda el trofeo más prestigioso de todo el fútbol. Los jugadores profesionales sueñan con poder disputar algún partido del Mundial en su vida y ganar el trofeo está reservado para unos pocos privilegiados. Argentina llevaba persiguiendo el sueño de la Copa del Mundo durante décadas hasta que llegaron los hombres elegidos por Scaloni en 2022, que consiguieron por fin darle la tercera Copa del Mundo al país. Sin embargo, desde el principio de la competición no todo estaba a su favor.

Algunas corrientes remaban en contra

Pese a que Argentina tenía un equipo de gran calidad, había algunos aficionados que no estaban del todo de acuerdo con algunos aspectos. Algunas casas de apuestas como YoSports, que cuentan con toda la información actualizada en cuanto a rendimiento y resultados se refiere, ponían a los argentinos como uno de los combinados favoritos, algo que no encajaba con otras corrientes de pensamiento.

Scaloni, el técnico argentino, era uno de los puntos que tenía algo de discordia, ya que no había dirigido nunca a un equipo de gran nivel y era el encargado de llevar a Argentina a la tarea de ganar el Mundial. Todo ello con el añadido de que, seguramente, podía ser el último Mundial de Leo Messi, la estrella argentina a la que todos los argentinos querían ver levantando la copa antes de retirarse del fútbol profesional.

Otro de los aspectos en contra fue el comienzo del propio campeonato. Después de ir ganando contra Arabia Saudí y tener varias ocasiones de gol para aumentar el marcador, los saudíes le dieron la vuelta al resultado ante la atónita mirada de todos los argentinos. Ningún aficionado al fútbol daba crédito a esa realidad: Arabia Saudí le ganó el primer partido a Argentina.

Empezaron a caer serias dudas sobre el equipo, que tenía el deber de ganar los dos partidos restantes para poder seguir luchando por el Mundial. Irse a casa en la fase de grupos era un cruel destino que no estaban dispuestos a afrontar, por lo que pudieron remontar la situación y acabaron ganando. El resto del relato ya es historia para Argentina.

Las consecuencias de haber ganado el Mundial son inmediatamente reconocibles. Para empezar, Leo Messi va camino de ganar un nuevo Balón de Oro si nadie se lo impide, algo que no es probable que ocurra. Uno de los mejores jugadores de toda la historia del deporte sigue dando alegrías a la afición argentina y, sin duda, será recordado para siempre.

Otros grandes jugadores que destacaron como Enzo Fernández han llamado la atención de numerosos clubes europeos de prestigio, que ya se pelean por saber cuál será el que se puede hacer con sus servicios. Más jugadores argentinos están en la misma situación que Enzo Fernández, y es que ganar el Mundial es el mejor de los escaparates.

En definitiva: Argentina ganó un Mundial teniendo algunas cosas complicadas encima de la mesa y el resultado es alegría y gloria para el propio país. Sin embargo, este amor por el fútbol no se detiene ahí e intentarán revalidar el título en el próximo Mundial.