Es muy fácil buscar en internet una reseña sobre FIFA 15, uno de los videojuegos más populares del mundo. Lejos de abocarnos a los aspectos técnicos y sus novedades en materia de controles y otras yerbas, en Marca de Gol aprovechamos la ocasión para abrir un nuevo debate: ¿Son los videojuegos un nuevo espacio de exposición de marca?
El catálogo de equipos con el que cuenta FIFA 15 es surtido, con ligas de diferentes partes del planeta. Entre ellas, está la Liga Argentina, aunque no totalmente licenciada. ¿Qué quiere decir esto? Que si bien tiene a los 20 equipos que disputan el Torneo de Transición, algunos de ellos no tienen el escudo oficial ni su equipamiento. De todas maneras, concentrémonos en los que sí lo tienen.
Usemos el Clásico de Avellaneda como ejemplo. En Independiente no solo encontrará el escudo oficial, sino también el equipamiento al día, con los nuevos sponsors en su lugar, con su tipografía y colores. Desde Audifarm Salud en las mangas a Banco Ciudad en la espalda. En Racing los detalles son exactos, desde el “Dueño de una pasión” hasta los búhos de Banco Hipotecario que decoran la camiseta blanquiceleste de la Academia. Desde luego, esto no es azaroso.
Electronic Arts negocia las licencias individualmente con cada club del fútbol argentino y, al adquirirlas, recibe los templates y escudos oficiales para generar el mayor realismo posible para su juego. Además de un ingreso por la explotación de sus licencias, los clubes del fútbol argentino y sus sponsors reciben algo impagable: una difusión mundial de su imagen y marca. La Liga Argentina viaja alrededor del planeta a bordo del FIFA 15. En una época donde los jóvenes conocen equipos exóticos y jugadores desconocidos gracias a enfrentarlos en sus consolas, estar presente en el mundo virtual se vuelve algo imprescindible.
¿Qué es lo que viene? Las respuestas están allí mismo. adidas es sponsor del juego y aparece en la estática de los encuentros y en la pelota. La Premier League de Inglaterra no solo tiene sus clubes licenciados, sino su formato televisivo y el mismo trofeo. Lo mismo hacen la Bundesliga y la Liga BBVA, entre otras. ¿Es lo mismo quemar horas de ocio para ganar un trofeo diseñado por un desconocido o levantar la copa con la que sueña su equipo en la realidad? Esos detalles de realismo busca el FIFA 15, porque esos detalles generan una pertenencia única, y la pertenencia genera pasión. EA Sports no sólo ambiciona mejorar la simulación del fútbol como juego, sino que busca trasladar a la consola el sentimiento de cada fanático.
Nobleza obliga, tampoco vamos a esquivar las virtudes que tiene este juego desde el lado del diseño. Del FIFA 15 podemos destacar que es fácil de manejar, con un menú ordenado y accesible. Además, uno puede seleccionar su equipo favorito y éste será el predeterminado para cualquier partido que quiera jugar, sea desde un amistoso, una partida online o los modos Torneo o Carrera como jugador o entrenador. Incluso, si la consola está conectada a internet, tiene la opción de jugar el partido que su equipo disputará este fin de semana.
En resumen, FIFA 15 es la prueba de cómo los videojuegos de fútbol maduran junto a sus seguidores. Desde la primera camiseta licenciada con la Selección Brasileña en el FIFA 1998 hasta hoy, el camino ha sido largo desde un juego de fútbol a un simulador de fútbol con detalles increíbles, donde los clubes se ven beneficiados desde diferente aristas. ¿Será este un mercado nuevo por explorar?
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