El mercado de los botines tiene varios pilares, que representan los diferentes tipos de botines que se adecuan a las características de cada jugador en particular. Mientras que algunos de ellos prefieren tener un botín con refuerzos para potenciar su fuerza, y otros buscan un toque más clásico con las pieles naturales, un gran porcentaje de los jugadores profesionales y a nivel aficionado buscan potenciar su velocidad para marcar la diferencia.
Desde el lanzamiento de la serie adizero F50, adidas se ha encargado de marcar la punta en la carrera por obtener el botín más ligero, incluso por encima de otros renombrados modelos como el Nike Mercurial, en todas sus variantes, o el PUMA evoSPEED. Tras el lanzamiento de la edición crazylight de los adizero F50, se pensaba que su bajo peso de 135 gramos jamás iba a ser batido, pero la marca de las tres tiras se encargó nuevamente de tocar un nuevo campanazo con un increíble lanzamiento.
Se trata de los adizero 99 gram, que tal como menciona su nombre, rompen la barrera de los 100 gramos, ubicándose apenas un gramo por debajo de ella para la talla más grande. Es decir, que a medida que baje el talle de la bota, el peso disminuirá unos décimos, hasta el peso mínimo de los 95 gramos. De esta manera, la marca alemana queda nuevamente en la historia del calzado deportivo creando un botín con un peso casi imperceptible para el humano.
Para lograr el cometido, tuvieron que pasar varios meses con pleno desarrollo de nuevas tecnologías que no sólo le permitiera bajar el peso hasta la cifra deseada, sino que también sea apto para ser utilizado dentro de un campo de juego. El primer paso fue dejar de lado los materiales sintéticos conocidos para la construcción de la carcasa, sustituyéndola por una capa de poliéster que le da forma de botín, con el agregado de poseer refuerzos de poliuretano para lograr la estabilidad y la consistencia necesaria, así como unos refuerzos en la zona de golpeo del balón.
Como no se pueden ‘desperdiciar’ gramos en material innecesario, la plantilla es ultra fina, aportando únicamente la cualidad antideslizante para mantener el pie bien estabilizado. La suela es otro de los puntos destacables, que combina las que tenían las dos últimas generaciones de los adizero F50. La parte trasera trasera está inspirada en la última edición, con tan sólo tres tapones; mientras que la parte delantera toma la distribución de tapones de la speedtraxion, con tacos de tres aristas para lograr los mejores arranques. Como agregado, se incluye la ranura para el chip informativo micoach.
Finalmente, su diseño es bastante simple, de color blanco para casi todo el modelo, interrumpido únicamente por las tres tiras de adidas a los costados del calzado, así como los logotipos de la marca en el talón y la lengüeta, ambos en color rojo.
Sólo 299 pares fueron fabricados y vendidos en tiendas seleccionadas a un precio de 300 Euros. El desarrollo tecnológico parece no tener fronteras, y menos a lo que se refiere en materia de peso. ¿Podrá alguien batir esta nueva marca de adidas o se buscarán nuevos horizontes en donde innovar? Sólo es cuestión de tiempo para saberlo, porque lo único que es seguro, es que habrá más y más sorpresas.
Fotos: adidas
