Under Armour siempre da que hablar. No sólo a través de sus productos, diseñados para la alta performance, sino también por los atletas que busca patrocinar y, sobre todo, a partir de las activaciones que realiza.
Su llegada al fútbol brasileño no fue la excepción: luego de abrir sus oficinas, buscaron un club de los “grandes” para debutar en las canchas. Tal como lo había hecho en Chile con Colo-Colo, posó sus ojos en el São Paulo FC, y lo terminó consiguiendo.
Tal como se informó el lunes pasado, cuando se oficializó la nueva camiseta del Tricolor, el partido elegido para el debut de la flamante indumentaria fue el encuentro por Copa Libertadores ante Cruzeiro, de local, en el estadio Morumbí.
Desde ya, la “primera vez” no podía pasar desapercibida: la marca eligió unos apasionados torcedores del club para que cumplan un auténtico sueño de hincha, entregar en mano las camisetas a los jugadores y que éstos las usen en el partido.
Es por esto que, ante los ojos de los miles de televidentes que observaban la transmisión, y también ante mucho del público presente en el estadio, la salida del equipo fue muy rara: los jugadores no tenían puestas sus camisetas, sino casacas blancas genéricas de Under Armour.
Claro, la sorpresa para todos vendría después, cuando fueron hacia un sector de la tribuna y desde allí les arrojaron las casacas que luego usaron en el partido.
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Para terminar de “cerrar” este original debut, la casaca usada en ese partido contó con la inscripción “I WILL” en el pecho, frase que es el actual slogan de la marca, aprovechando que São Paulo aún no posee sponsor para esa ubicación.
Marca de Gol
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