“El mundial es mucho más que sólo 64 partidos de fútbol repartidos en más de 30 días“, dijo el presidente del Comité Organizador del Mundial 2010, Danny Jordan, en directa alusión a las multimillonarias ganancias que atraerá la próxima Copa del Mundo Sudáfrica 2010.
Algunos datos: se espera que medio millón de extranjeros viajen a ese país durante los 31 días en que se disputarán dichos encuentros (entre el 11 de junio y el 11 de julio), según la directora del Comité de Turismo sudafricana, Didi Moyle.
Asimismo, se estima que la venta de productos que tengan relación con la Copa del Mundo constituya un negocio que puede generar unos 3 mil millones de dólares.
En ese sentido, Danny Jordan aseguró que el país africano espera que la máxima gesta futbolera actúe como un catalizador para la economía nacional donde los sectores del deporte, turismo, transporte, telecomunicaciones y la construcción ya han comenzado a recibir un fuerte impulso.
Las empresas están concientes de este fenómeno y por ningún motivo quieren quedarse atrás. Por ello, la lucha para ser parte de esta fiesta deportiva no ha quedado únicamente remitida a las canchas de fútbol; mientras los directores técnicos y jugadores de cada equipo se preparan para llegar de la mejor forma a los encuentros, las máximas compañías del mundo pelean un puesto dentro del negocio.
El negocio “no oficial”
Hasta 125 millones de dólares cuesta ser patrocinador oficial de Sudáfrica 2010, por lo que estar vinculado a este gran evento no resulta barato.
Para este tipo de eventos, la FIFA cuenta con un sistema de patrocinios divididos en tres categorías:
1. En primer lugar se encuentran empresas como adidas, Coca Cola y Visa que son vinculadas a todos los torneos de la organización y que deben desembolsar cerca de 125 millones de dólares.
2. La segunda categoría es para auspiciadores únicamente para Sudáfrica 2010, como McDonald’s y Budweiser, quienes tienen la opción de renovar su contrato, pero no son fijos como los anteriores. La cuota de ingreso para éstos es de 40 millones de dólares.
3. El tercer grupo está destinado para marcas locales, aunque no existe mucho conocimiento sobre estas tarifas de ingreso.
Pero ¿qué sucede con aquellas pequeñas y medianas empresas que intentan sacar provecho de este evento y que no cuentan con tales cantidades de dinero?
Ante las restricciones comerciales que pone la Federación Internacional de Fútbol -no pueden usar los logos de la FIFA en sus productos- están destinados a fabricar imitaciones o buscar otras alternativas.
De este mercado nace un sinfin de ideas. Los “Makarabas”, por ejemplo, cascos de minero transformado en coloridos sombreros para fanáticos del futbol, son parte de un sector de productos no oficiales relacionados al mundial con los que los sudafricanos más pobres esperan capitalizar este gran evento.
Por medio de un reportaje denominado “Productos no oficiales del Mundial“, la cadena de televisión británica BBC muestra cómo un pequeño comerciante de Johanesburgo fabrica y vende estos llamativos cascos a las personas de su comunidad y a los turistas que ya comienzan a demandar estos artículos.
“A las gorras les dibujo el logo y los colores alusivos a cada equipo de fútbol“, dice el sudafricano durante la entrevista.
Los artículos que se ofrecerán varían desde sombreros, muñecos, pelotas, camisetas, y hasta “juegos de metegol”, entre otros. Éstos estarán disponibles en todas las calles del país.
Uno de los principales argumentos que tienen estos comerciantes por sobre los productos masivos es su valoración como “artesanal” y 100% sudafricano, ya que la mayoría de los negocios que consiguieron el permiso de la FIFA tienen procedencia extranjera.
Las oficiales
Dos marcas que hace tiempo ingresaron al negocio, y de manera privilegiada, son adidas y Deportes Martí. Ambas compañías diseñaron y serán las encargadas de comercializar el balón oficial del Mundial, que lleva por nombre Jabulani.
La ventas por éste y el resto de los artículos relacionados con el evento podrían llegar a los 3.5 millones de productos, según estimaciones realizadas por los ejecutivos.
Carlos Gómez, director general de Deportes Martí, indicó que la empresa realizará todos los lanzamientos importantes relacionados con Sudáfrica 2010 gracias a una alianza con la Embajada de Sudáfrica.
Otro de los ganadores fue Walmart, que se convertirá en la tienda oficial del Mundial. La cadena estadounidense colaborará con el licenciatario mundial exclusivo de la Federación Internacional Fútbol Asociado (FIFA), Global Brands Group (GBG), para operar las tiendas oficiales de la Copa de Mundo en la mayoría de los mercados en donde opera.
En sus sucursales, la compañía contará con un espacio especialmente dedicado a ofrecer productos oficiales. Además se organizarán eventos alusivos en las fechas cercanas a los partidos.
La competencia por tener un lugar entre las marcas oficiales tuvo su máximo nivel durante la realización de Soccerex, un congreso sobre negocios de este deporte, el pasado 28 de noviembre.
Más de cuatro mil delegados de empresas futbolísticas, federaciones y clubes de 95 países, es decir, todos los “pesos pesados” de la industria futbolera, llegaron al barrio de Sandton, en Johannesburgo, con la esperanza de sellar acuerdos y exponer sus productos.
Las empresas que exponen en Soccerex cubrieron todos los aspectos de la industria: desde comercio, entrenamiento, diseño y gestión de eventos, hasta logística, marketing, fabricación y construcción.
¿Quiere usted conseguir un recuerdo de la cultura sudafricana cuando viaje al Mundial de Fútbol 2010? Entonces, tienes dos opciones: las tiendas oficiales, administradas por empresarios de corte internacional o aquellas de verdaderos artesanos que representan la cultura de los pueblos de África.
Fuente: Alto Nivel (México)