La UEFA repartirá 910,3 millones de euros entre los participantes de esta edición de la Champions League. 500,7 premiarán los méritos deportivos. El resto, 409,6, se distribuirá en función de diferentes variables (market pool, en lenguaje UEFA) y de ellas las que más pesan son la cuota de pantalla y el contrato que el operador televisivo de cada país haya suscrito con la propia UEFA.
No cobra, pues, quien más gana sino quien más público arrastra, y ahí la demografía es factor decisivo. Eso explica que la Juventus, eliminada en cuartos de final de la última edición, se embolsara 65 millones por su participación, frente a los 55 del Bayern campeón. 48 recibió el Madrid y 45 el Barcelona, ambos semifinalistas, que se ven penalizados frente a equipos de países más poblados y que pierden la ventaja de la que sí gozan en España: 140 millones por cabeza procedentes de los operadores televisivos domésticos por sólo 42 de sus perseguidores (el Atlético, también en la competición, uno de ellos).
Por este mismo concepto, Juventus o United obtienen de sus ligas 95 y 76 millones, respectivamente. La negociación conjunta de los derechos amortigua el desequilibrio interior.
Para el resto de equipos españoles, un año en Champions les despeja el futuro. El Málaga, la temporada pasada, fue eliminado en el descuento del partido de vuelta de los cuartos de final, ante el Borussia Dortmund, con un gol ilegal de Felipe Santana, pero se consoló con los 32 millones que le dejó la competición. Este año, fuera de ella, ha reducido su presupuesto de 93 millones a únicamente 40.
Los premios estrictamente deportivos, en cambio, no entienden de privilegios históricos: 2,1 millones por cabeza por participar en la fase previa; 8,6 por estar en la de grupos, con el extra de un millón por victoria y 500.000 por empate; 3,5 por llegar a octavos; 3,9 por pasar a cuartos y 4,9 por alcanzar las semifinales.
El campeón recibe 10,5 millones y el finalista, 6,5. Hasta 37,4 millones puede ganar, por este concepto, el que firme el torneo perfecto, más tres si conquista además la Supercopa.
Por Miguel Angel Calero
Fuente: As