Le salió caro, pero terminó la duda. Tras la avanzada de Nike, que triplicaba el monto actual, todo parecía indicar que la marca estadounidense se iba a transformar en el nuevo proveedor de la celeste (ver más detalles). Sin embargo, con un fuerte esfuerzo económico, finalmente Uruguay y PUMA renovaron su contrato de indumentaria, finalizando con un mar de polémicas, que ha llegado a incluir a los principales referentes de la selección.
El acuerdo se ha firmado en las últimas horas tiene exactamente las mismas condiciones que el que proponía la marca con base en Oregon, Estados Unidos. Es decir, está valuado en nada más, ni nada menos, que 24,5 millones de dólares, que serán distribuidos equitativamente en un plazo de 7 años a partir de la fecha, es decir, hasta 2023.
Como la mayoría de los contratos, además también incluye premios por buenos resultados deportivos en las próximas competencias, como las Copas del Mundo de 2018 y 2022, así como en las Copas América. A su vez, también se resolvió el caso con la empresa Tenfield, que seguirá siendo parte de este convenio. Este fue el desencadenante para que jugadores como el capitán Diego Godín pusieran la voz en alto alegando que “había cosas que cambiar”. ¿Te gusta que Uruguay y PUMA siguen juntos, o crees que era el tiempo de hacer un cambio para el país sudamericano?