Velocidad, velocidad, velocidad; pero sin dejar de lado todo lo demás. La firma del felino sigue apostando de lleno por un concepto de calzado que parecía haberse extinguido, pero que reflotó en los últimos años: los ultraligeros. Buscando competirle de igual a igual a sus pares de adidas y Nike, se lanzaron los PUMA ULTRA Ultimate. En Marca de Gol los llevamos al campo de juego para probarlos.

Review | PUMA ULTRA Ultimate

La primer sensación viene del lado de lo visual. Tienen una apariencia -subjetivamente- hermosa; sobre todo en este colourway con la base blanca y el diseño colorido en el superior. Una mezcla de elegante, pero con su toque ‘radical’. Ya en los pies (después de la difícil tarea de ponérselos), todo es muy propio de este tipo de modelos: se sienten por demás livianos. Con todo tipo de lógica, teniendo en cuenta sus materiales finos, y la ausencia de elementos en relieve en la carcasa. No por eso dejan de ser cómodos, con insertos mullidos en el talón y una plantilla con buena amortiguación. Sin ser su punto más fuerte, el confort no deja de estar. A tener en cuenta que su horma es algo angosta.

El foco en este botín está puesto en el movimiento, en lograr las reacciones más rápidas y la mayor tracción. ¿Cómo logra esto? En primer lugar, con la tecnología ‘Pwrtape’; una especie de estructura que envuelve el pie, evitando torsiones y deslizamientos indeseados. Esto se acompaña con un textil no muy elástico en el empeine y una talonera que, si la forma del pie acompaña, mantiene todo muy bien ajustado. Para aquellos con el pie más ancho y alto, tal vez no sea la opción más recomendada. La placa de la suela, por su parte, se mantiene inalterada con respecto a su antecesor. Es muy reactiva en la zona de la puntera, sintiendo ese ’empujón’ ante cada pisada; con sus respectivas zonas rígidas en el puente del pie. Sin dudas, acá está lo mejor de esta generación.

Si bien el toque de balón no es su característica más destacada, logramos sentirnos a gusto con su desempeño. Su carcasa puede sentirse algo ‘de plástico’, pero su superficie texturada logrará conseguir algo de mejor grip con la pelota. Sí es cierto que al ser tan fino su material todo repercute en el pie. El lado bueno es que no hay distorsiones, en parte, es como jugar descalzo; la mala es que ante reiterados golpeos fuertes o mismo un pisotón, nuestro pie no está muy protegido. Una contra propia de este estilo de botín.

Concluyendo, por un precio muy competitivo en relación a sus rivales (hasta $100.000 más baratos que unos adidas X Crazyfast+ al día de la fecha), tendremos un calzado de primerísimo nivel. Sí recomendamos probarlos antes de comprarlos/usarlos, porque ciertamente no son para todo tipo de pie.