¿Puede un club decir no al dinero? El caso de Vélez Sarsfield con un sitio de apuestas

Las casas de apuestas ya no son una novedad en Argentina. Su influencia, particularmente acentuada durante la pandemia de 2020, es de público reconocimiento. Los nombres de las grandes marcas son distinguidas, incluso por quienes no practican las apuestas. Y es que su táctica de marketing consistió en permear el ambiente futbolístico; desde vallas publicitarias hasta las camisetas de los equipos, todo lleva el nombre de una casa de apuestas.

Las empresas del rubro han encontrado una gran puerta de entrada a la sociedad mediante los contratos de patrocinio que inyectan un importante dineral en el club a cambio de la libertad para promocionar sus servicios. Pero, ¿a costa de qué? Los crecientes índices de ludopatía parecen dar respuesta a la interrogante. Las críticas provenientes de diferentes sectores que combaten la adicción a las apuestas no tardaron en aflorar.

En medio de la crisis financiera que atraviesan los clubes, Vélez Sarsfield sorprendió con la decisión de descontinuar su contrato con bplay, uno de los sitios de apuestas deportivas con mayor influencia en Argentina. El club ha demostrado un fuerte compromiso social con los hinchas argentinos dando la espalda a un acuerdo que bien podría haber llenado los bolsillos de la institución.

Vélez ya ganó

Quitar el sponsor de su camiseta fue un mensaje contundente del club hacia sus seguidores. Las casas de apuestas han entrado con fuerza en el entramado social cayendo con todo su impacto en la población más joven. Mientras una histórica crisis económica sacude al país, los jóvenes vislumbran futuros poco prometedores y las apuestas suplen la carencia de un ingreso.

Hace ya algunos años que los contratos de patrocinio entre casas de apuestas y clubes deportivos han sido señalados como un fenómeno que debe ser desalentado. En Argentina, los clubes son un espacio de amparo y construcción para muchos jóvenes que ya se encuentran en situaciones vulnerables. El enlace con sitios de apuestas muestra una nueva cara de los clubes; pareciera que las instituciones priorizaran la rentabilidad por sobre su valor en la comunidad.

Es cierto que los clubes de fútbol atraviesan un período financiero crítico y los planteos de privatización provenientes del oficialismo complejizan el escenario. Las organizaciones necesitan de ingresos para subsistir y las casas de apuestas ofrecen un goloso financiamiento. En este difícil contexto, la posición del “Fortín” fue aplaudida por los representantes de la Cámara de Diputados.

La Cámara de Diputados busca desalentar la alianza entre clubes y casas de apuestas

Distintos representantes de la Cámara de Diputados (UCR, Hacemos Coalición Cívica, UP y el PRO) firmaron un proyecto de declaración en el que se extendió el reconocimiento y la felicitación al club de Liniers por descontinuar el contrato de patrocinio con la casa de apuestas bplay. Aunque LLA brilló por su ausencia, por primera vez, en un contexto sociopolítico delicado se encontró un punto de confluencia en un tema de prioridad en la agenda argentina; la ludopatía infantojuvenil.

La dirigencia del club no se dio por aludida e hizo clara mención a los motivos por los cuales decidieron no prorrogar el contrato: “Porque sabemos lo que significa la ludopatía y, sobre todo, adolescente. Los trastornos que genera, las consecuencias para la salud y la vida de muchísimas personas”, expresó el vicepresidente del club, Augusto Acosta. La voz de las autoridades, tanto de los diputados como de los dirigentes, es esencial para la toma de conciencia sobre el impacto de las apuestas en el ámbito.

El proyecto emitido por los diputados busca desalentar los contratos de patrocinio entre las partes, a la vez que refuerza los pedidos elevados por distintas organizaciones de la sociedad civil (OSC) de crear políticas de prevención. La anulación de la clandestinidad en el rubro es uno de los ejes más importantes, se trata de sitios ilícitos que no integran mecanismos de seguridad como los filtros de ingreso para menores de 18 años.

El “Fortín” apuesta por la salud de las juventudes

Vélez se convirtió en el primer club en dar la espalda a las grandes de las apuestas. Otros, ya llevan su sello en el centro del pecho; tanto las camisetas titulares como las camisetas alternativas de River Plate abanderan el nombre de Codere, su principal sponsor. ¿Llevan los hinchas la camiseta del club, o la de la marca que lo financia? Los límites son difusos; pero el impacto sobre esta alianza no tiene nada de gris.

Otros países que combaten la misma problemática han tomado distintas posturas. En Inglaterra los mismos clubes se pusieron de acuerdo para no firmar contratos de patrocinio con casas de apuestas. España, en la otra esquina, fue por una máxima intervención del estado que dictaminó un Decreto que prohibió las alianzas de patrocinio con clubes deportivos, entre otras restricciones.

Argentina carece de un marco regulatorio estricto y los clubes están librados a tomar las decisiones que más conveniente les resulte. Dar de baja un contrato con una empresa de apuestas nada tiene de conveniente para el club, que claramente necesita del impulso económico. La postura de Vélez envalentona a los clubes deportivos a reconocer el valor simbólico que estos tienen en el tejido social, y congrega a las autoridades gubernamentales a elaborar planes de acción concretos que resguarden a las juventudes.