El logo del Bicentenario, el Pabellón Nacional, el reconocimiento al Oreja Rodríguez tras su muerte en un accidente o a los chilenos por el terremoto de 2010, el recuerdo de las tres Copa Libertadores que ganó el club, la referencia al decanato, la camiseta celeste en homenaje al primer triunfo de la selección que estuvo representada por futbolistas tricolores y, desde el martes y durante toda la Copa Bridgestone Libertadores, el número de socio de cada jugador acompañando el nombre en la espalda forman parte de la moda del tuning en las camisetas de fútbol. Estrategias marketineras para vender camisetas, o simplemente para rendir tributo a una persona o a una institución sin fines de lucro.
“La que estamos desarrollando en la Copa es una movida de concientización hacia nuestros hinchas“, explica el responsable del departamento comercial, de comunicación y de marketing de Nacional de Montevideo, Aldo Villar.
“Tiene un doble sentido: transmitir a nuestra hinchada la importancia de la identificación social, el compromiso con el club, el sentido de pertenencia, que ser socio va más allá de un resultado deportivo, que ser socio es para toda la vida, que el aporte de cada uno le permite al club generar recursos genuinos; y por otro lado también está el sentido marketinero de vender camisetas”, subraya.
Por esa razón, el martes ante Barcelona de Ecuador en el Parque Central, Iván Alonso salió con el número 29 en la espalda, su apellido y el número 107.181, con el que está registrado en el padrón social. Así como el goleador, cada uno de los 30 futbolistas de Nacional inscritos en la lista de buena fe de la Copa, todos están plenamente identificados con el club.
“En este caso la movida cumple un objetivo social y forma parte de la meditación de la campaña social que estamos realizando, que trasciende la actividad local y a través de la cadena Fox, que es la que transmite la Copa, llega a todo el mundo“, destaca Villar.
Con el desembarco de Eduardo Ache en la presidencia, Nacional inició una campaña para llegar a los 100.000 socios, y una de las primeras acciones fue asociar a todos los jugadores. Algunos de ellos ya pertenecían al padrón social, otros se integraron en este 2013.
El cambio en el diseño, las referencias a hechos que marcaron la historia o el presente forman parte del tuning.
“A lo largo de los últimos años también se hicieron reconocimientos emocionales o de solidaridad con el pueblo chileno. En esos casos no se buscó marketing ninguno, ni se realizaron acciones con la finalidad de vender camisetas. Por ejemplo, al tener disponible el espacio en el frente de la camiseta cuando se registró el terremoto en Chile, lo que hubo fue una solidaridad del club con el pueblo chileno. No hubo motivos comerciales. Esa camiseta no se puso a la venta“, explicó Villar sobre lo que sucedió en 2010.
Las camisetas con la leyenda “Arriba Chile”, fueron donadas por Nacional y las subastaron para recaudar fondos para las víctimas del terremoto.
En 2011, Nacional jugó con camiseta celeste con el Pabellón Nacional en la manga izquierda. “Lo hicimos para indentificarnos con lo que somos, con nuestra raíz, con Uruguay”, dijo.
Sobre el logo del Bicentenario del proceso de emancipación oriental, que Nacional lució en la camiseta en 2011, Villar manifestó: “Fue un compromiso institucional; incluso Nacional fue uno de los auspiciantes que apoyó la transmisión de los festejos por televisión“.
Sobre la camiseta celeste que desde 2011 utiliza Nacional en cada setiembre, como homenaje al primer triunfo de la selección representada por jugadores albos en ese mes de 1903, Villar recordó: “La celeste rompió todos los récords, los hinchas hacían cola en el Bolsoshop como si estuvieran comprando entradas, y en 10 días se agotó“.
Por otra parte, a fines de 2012 el club lanzó una edición limitada de la camiseta de Álvaro Recoba, y actualmente otra de Sebastián Abreu.
Fuente: El Observador (Uruguay)
Fotos: Sitio Oficial Club Nacional de Football